La delegada del Gobierno, María Salom, ha comparecido en el que previsiblemente será su último acto publico o uno de los últimos en el cargo. Salom ha reconocido que no sabe exactamente cómo van a evolucionar los acontecimientos en los próximos días y no se ha atrevido a dar una fecha exacta para dejar su cargo. Ha dicho sentirse triste y preocupada por la situación en la que va a quedar España y Baleares en concreto. Cree que es negativo que Pedro Sánchez llegue al Gobierno con el apoyo de partidos independentistas y augura que la inestabilidad será un problema para el crecimiento económico. Dice la delegada del Gobierno que le horroriza que la presidenta del Govern, Francina Armengol, haya manifestado que esta orgullosa de que el modelo de pactos de las Islas se exporte a nivel estatal. Salom dice que seguirá como afiliada al PP pero desconoce cómo será su vida a partir de ahora.

La delegada del Gobierno, María Salom, defiende que su trabajo siempre ha estado amparado por la legalidad y que las decisiones que ha tomado han ido encaminadas a hacer respetar la Constitución y las leyes. Por eso, cree que sera trabajo de su sucesor decidir qué camino adoptar. Desconoce qué pasará con los recursos que ha presentado por el catalán y por el cobro de la carrera profesional y que tanta polémica han levantado. De todas formas confía en que el próximo delegado del Gobierno se preocupe de seguir la senda que marcan las leyes.