El Partido Popular en Baleares ha mostrado su absoluto rechazo a la expropiación de viviendas en Baleares. El presidente del PP, Biel Company, ha definido la expropiación de las primeras 56 viviendas en las islas como ''una medida populista al estilo de la Venezuela chavista'' y acusa al Govern de emprender una persecución a la propiedad privada.

Lo que esta demostrando con esta forma de actuar, dice Company, es que ha sido un ''auténtico fracaso'' todo lo que es la política de vivienda desde que gobierna el pacto de izquierdas en baleares. Insiste en que no se puede suplir esta falta de política atacando a la propiedad privada.

El Govern defiende la expropiación

La presidenta del Govern balear, la socialista Francina Armengol, ha defendido el inicio del proceso de expropiación de 56 inmuebles vacíos de grandes propietarios de Baleares para destinarlos durante 7 años al alquiler social. Se trata de una medida pionera que ha generado una gran polémica y que Armengol cree que debería extenderse a otros territorios de España.

Armengol destaca que el objetivo de la Ley balear de Vivienda es que bancos y fondos buitre pongan en alquiler pisos que llevan años vacíos. "Es una política adecuada en estos momentos", defiende la mandataria balear.

Rechazo del sector inmobiliario

El presidente de la Asociación Balear de Servicios Inmobiliarios (ABSI), Antoni Gayà, ha calificado de ''barbaridad'' la medida. Adelanta el presidente que probablemente ''muchas empresas extranjeras que hacen negocios en las islas pueden que se echen para atrás''. Asegura Gaya que se están cargando la inversión y que estas acciones lo que crearán es que las personas que estaban dispuestas a hacer inversiones, al darse cuenta de que no tienen ninguna seguridad jurídica, se lo pensarán dos veces.