El alero mallorquín de 20 años, regresa para ponerse a las órdenes de Diego Tobalina con el filial del Bahía San Agustín en la Liga EBA. El joven jugador regresa a Mallorca con la intención de volver a coger ritmo de competición tras su lesión de rodilla.

El jugador probó suerte fuera de las islas y aterrizó en 2016 en el Fuenlabrada. En 2018 firmó como cedido por el Termes de la LEB Plata, aunque sufrió en medio de un partido contra el Plasencia una taquicardia que le tuvo más de tres meses alejado de las canchas. Notaba un cierto dolor en el pecho y en medio del tercer cuarto del partido, se detuvo el encuentro.

El deportista fue trasladado de inmediato al hospital tras su desplome en el terreno de juego. A pesar de su recuperación en medio de la pista, los servicios sanitarios trasladar a Sureda a un hospital por precaución. Pero su mala suerte no cesó después de este acontecimiento. Regresó a los entrenamientos en febrero de 2019 y se le diagnosticó una osteocondritis disecante - enfermedad del hueso que se haya debajo del cartílago de la rodilla que desfallece por falta de riego sanguíneo-.

Aun así, Pere Sureda no se ha dado por vencido y regresa a la Isla para reencontrarse con su mejor versión antes de sus infortunios.En el pasado, se coronó como uno de los jugadores habituales de la selección española en las categorías inferiores, colgándose la medalla de bronce de 3x3 en septiembre de 2018 en los Juegos del Mediterráneo.