Alejandro Pozo, jugador del Sevilla FC, está muy cerca de convertirse en nuevo futbolista del Real Club Deportivo Mallorca; el andaluz no estaba contando con demasiados minutos en el conjunto de Nervión y el club sevillista ha decidido que lo mejor para el futuro del joven futbolista es salir cedido para continuar con su progresión.

Como adelantaron Deportes COPE Sevilla y Deportes COPE Mallorca, el Mallorca era uno de los clubes más interesados en hacerse con sus servicios y finalmente parece que el jugador se ha decantado por la oferta bermellona pese a que se espera confirmación oficial. Además, como apuntan medios italianos el volante zurdo Diego Laxalt, del AC Milán, también parece que cuenta con una propuesta del Mallorca aunque por ahora no hay más información al respecto.

En lo que se refiere a Pozo, que parece la opción más próxima; apenas ha gozado de protagonismo en el conjunto de Julen Lopetegui; además cuando ha jugado lo ha hecho como lateral derecho pese a que su posición habitual en el terreno de juego es la de extremo, posición que ocupó el pasado año con el Granada y desde la cual hizo un espectacular golazo precisamente al Mallorca en Los Cármenes. Ahora, tras la salida de Aridai destino Las Palmas el club ha optado por reforzar la banda derecha para suplir al canario.

Con el Granada la pasada campaña en Segunda División, Pozo tuvo un papel más que destacado; disputó un total de 23 partidos entre los cuales materializó cuatro dianas y dio una asistencia además de lograr el ascenso a LaLiga Santander de forma directa. El acuerdo entre clubes parece inminente y el de Huévar del Aljarafe se convertirá muy probablemente en el primer refuerzo del club balear en este mercado de invierno.

Por la posición que ocupa en el terreno de juego, la de carrilero, parece que llegaría para jugar en el sistema de tres centrales y dos carrileros largos que en las últimas fechas ha estado trabajando Vicente Moreno. Ante la irregularidad de resultados y el pobre bagaje lejos de Son Moix el técnico bermellón, acusado muchas veces de inmovilismo, ha buscado alternativas y la nueva formación del Mallorca en los recientes partidos así lo demuestran. Ahora, el Mallorca está a punto de cerrar una nueva pieza con la que luchar para lograr una permanencia, que está muy difícil pero ni mucho menos es imposible.