La Policía Local de Vigo interceptó en la madrugada del día 12, en la confluencia de las calles Marqués de Valladares y Reconquista, un vehículo eléctrico de dos ruedas circulando a gran velocidad que estaba siendo conducido por un joven de 21 años que fue parado e identificado por los agentes de una patrulla que vigilaba el tráfico en la zona.

Tras cotejar los datos del conductor, comprobaron que carecía de cualquier permiso de circulación y también que el vehículo que conducía era realmente una bicicleta eléctrica a la que se le había añadido el motor de un patinete. Esto lo convierte en un ciclomotor eléctrico por lo que se hace necesario contar con un permiso de la clase L1eB para poder conducirlo.

A mayores, la patrulla que le dio el alto comprobó que presentaba síntomas de hallarse bajo los efectos del alcohol o de las drogas por lo que procedió a realizarle la preceptiva prueba que arrojó resultados positivos aunque sin sobrepasar el límite penalmente establecido para convertir la infracción en delito.

Debido a la carencia de permiso para conducir un ciclomotor eléctrico y por la falta del seguro obligatorio los policías instruyeron diligencias por un presunto delito contra la Seguridad Vial que fue trasladado a la autoridad judicial competente.