La Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS) llevará a cabo la demolición de la presa de Gudín, en el río Faramontaos, en Xinzo de Limia.

La infraestructura -de 66 metros de coronación y 15,6 metros sobre cimientos- no tiene concesión en la actualidad, por lo que carece de labores de mantenimiento, y como tampoco tiene un Plan de Seguridad, su deterioro puede suponer un peligro a medio y largo plazo.

Según informa del organismo dependiente del Ministerio para la Transformación Ecológica y el Reto Demográfico, este obstáculo transversal es altamente nocivo para el ecosistema acuático y actualmente carece de uso, por lo que con su eliminación se recuperará la conectividad ecológica del río.

Los vecinos de Gudín defienden la permanencia de la presa como abastecimiento de los medios aéreos en caso de incendio pero, en una reunión mantenida por el presidente de la CHMS con la presidenta de la AVV de Gudín, José Antonio Quiroga les trasladó la necesidad de acometer la demolición de la infraestructura y se comprometió a la construcción de una nueva balsa para la carga de agua en la zona.

El presidente del organismo dependiente del Ministerio para la Transformación Ecológica y el Reto Demográfico y la alcaldesa de Xinzo, Elvira Lama, firmaron recientemente el convenio para la financiación y la ejecución de las obras, en las que se invertirá un total de 1,2 millones de euros, un 80% será aportado por la CHMS y el 20% restante por el concello de Xinzo. El proyecto incluye la construcción de una pasarela que comunicará ambas márgenes del río, así como la recuperación ambiental de la zona.