La comisión municipal se reúne por segunda vez para tratar de buscar una solución al problema de los ruidos en la zona de los vinos. Este equipo de trabajo, formado por integrantes de todos los grupos políticos, asociaciones vecinales y hosteleros, está funcionando desde el pasado 3 de diciembre ante la problemática suscitada entre los vecinos de la zona.
La concejala de Urbanismo, Sonia Ogando, aseguró que “vamos por el buen camino con la voluntad de llegar a puntos de encuentro para buscar una solución global a la problemática que afecta de modo más acusado a la zona monumental”.
La edil de Urbanismo indicó que desde el gobierno de Ourense se está “trabajando con intensidad” y para ello “se intensifica el control de los sonómetros y está sobre la mesa la posibilidad de incrementar la cuantía de las sanciones”. En ese sentido, incidió en que el tema de los ruidos “no se puede circunscribir sólo a la hostelería sino que es un problema global donde están implicados muchos agentes”.