El incendio de Oímbra que afecta a 70 hectáreas de este municipio ourensano se inició cerca del pueblo de As Chás y el viento condujo las llamas hacia el paraje de Santa Ana, donde se encuentra la pequeña capilla que albergaba la imagen de la santa. El fuego alcanzó el tejado de la capilla y, finalmente, calcinó todo el interior del pequeño templo. No quedó nada: ni bancos, ni altar.

Tampoco se salvó la talla de Santa Ana con la Virgen Niña que desde hace muchos años se venera en este templo. De ella, el párroco, Omar Bello, sólo pudo recuperar las coronas de la santa y de la Virgen.

La reacción de los vecinos al conocer lo que había pasado con la iglesia de Santa Ana “fue de dolor, consternación y asombro” y “ahora la gente mayor está llorando a la santiña”, señaló Omar Bello en declaraciones a COPE Ourense.

El pequeño templo acoge cada 26 de julio la principal romería de Oímbra. Cuentan que fue construido para agradecer a la santa que los vecinos del municipio se salvaran de la persecución de los ejércitos portugueses.