La fiscalía ha rebajado de 15 a 10 años la petición de cárcel para la chica de Ourense que en 2015 abandonó a su bebé recién nacido en un contenedor de basuras del barrio de O Vinteún. Dio a luz en el baño de su casa y dejó al niño envuelto en trapos y dentro de una bolsa. Afortunadamente lo encontró un hombre que avisó a las fuerzas de seguridad.

Inicialmente se desconocía quién era la madre, pero la investigación de la Policía Nacional dio con ella dos meses después. Contaron con la colaboración de familiares de la acusada, que no sabían que estaba encinta, pero que comprobaron como adelgazaba de modo repentino y sospecharon que podría haber sido ella la que abandonó al niño.

Se ha tenido en cuenta que la acusada ha reconocido los hechos, pero además de la pena de prisión reclaman también para ella la privación de la patria potestad y la prohibición de acercarse al niño a menos de 500 metros durante 20 años.

Por el juzgado han pasado este lunes dos testigos del hallazgo del bebé en el contenedor, que le prestaron los primeros auxilios y también el novio de la acusada, que dijo desconocer que la chica estuviese embarazada. "No quería ir al médico", explicó.

El niño está bien, se encuentra actualmente con una familia de acogida.