El presidente de la Hostelería de Galicia y de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería e Turismo de Lugo, Cheché Real, reconoció que el último trimestre de este año será “muy malo” para su sector, como consecuencia de la previsible bajada de ingresos y la subida de gastos, como la factura por el suministro de eléctrico, que suman un porcentaje importante en la cuenta de explotación.

En declaraciones a Cope Lugo, reconoció que “el último trimestre de este año y, probablemente también 2023, será fastidiado, porque la hostelería está acostumbrada a pagar los recibos con la caja, pero al bajar los ingresos, la situación va a complicarse”, dijo Real.

“Las cuentas son fáciles de hacer. Previsiblemente, los ingresos van a bajar y los gastos no. Aunque bajen los ingresos, no podemos apagar las neveras, los botelleros, las luces de los locales o el aire acondicionado”, precisó Real.

NO SE PUEDE REPERCUTIR

Aunque “se puede repercutir algo de esa subida en las cartas”, de ningún modo “en la misma proporción que nos han subido a nosotros gastos como la factura por el suministro eléctrico”, aclaró.

Por ello, aunque hay locales que, seguramente, tienen “músculo” para soportar esta situación, otros, previsiblemente, se quedarán por el camino.

“Seguramente suceda como en la pandemia, al principio podrán mantenerse abiertos, pero después no podrán resistir”, lamentó el presidente de la confederación que agrupa a las asociaciones provinciales de hostelería en Galicia.

Por otra parte, recordó que los hosteleros se están encontrando con otro problema que también complica mucho su actividad. “No hay gente para trabajar, no la encontramos”.

“Algo está fallando, porque no solo pasa en este sector, y más cuando tenemos más de tres millones de parados”, concluyó.