La Confederación de ANPAs Galegas ha emitido un comunicado en el que expresa el apoyo de este colectivo “a la reivindicación” que están haciendo los padres de O Courel en relación con el transporte escolar del colegio local, porque demandan “justamente” un “trato diferenciado para una realidad diferente”.

Los alumnos del colegio Poeta Uxío Novoneyra, de O Courel, no se han reincorporado hoy a sus clases después de las vacaciones de Navidad, a causa del paro convocado por el ANPA del centro como medida de protesta por los cambios que prevé aplicar la Consellería de Educación en el sistema de transporte escolar.

Según han explicado fuentes del ANPA, hasta ahora el servicio de transporte escolar lo realizaban los taxistas locales -organizados en seis rutas-, que se ocupaban de recoger a los niños -unos treinta alumnos- en sus respectivas aldeas y de trasladarlos al colegio.

Sin embargo, según la asociación de padres, con los cambios previstos por la Consellería de Educación, los niños “se pasarán más de una hora en el autobús” para llegar al colegio y, además, tendrán que esperar por el transporte en lugares apartados en los que no hay marquesinas ni sitio para guarecerse de las inclemencias del tiempo.

La Confederación recuerda que “el ANPA de O Courel lleva muchos días movilizándose para evitar que la Consellería de Cultura, Educación e Universidade licite las líneas de transporte escolar en las condiciones que tiene previsto”.

Unas condiciones, opina, que “llevarán a una reducción del número de rutas y, por lo tanto, a un incremento muy considerable del tiempo de recorrido”.

“Pero no solo es esto. Es que, por otra banda, todos los taxistas que hacen las rutas escolares se quedarían sin trabajo”, lo que supondría que “el 20% de las familias del colegio perderían buena parte de sus ingresos, en una zona donde las posibilidades de encontrar trabajo son bastante limitadas”.

Por ello, la Confederación de ANPAs Galegas sostiene que “lo que se pierde en este situación no es solo calidad en el transporte escolar y puestos de trabajo”, sino que “lo que perdemos todos es un poco más de la montaña y del rural”.

“Es un problema de todo el país y, por lo tanto, es “un problema nuestro”, concluye.