Agentes de la Policía Local de Lugo denunciaron al propietario de un establecimiento de hostelería por servir a su clientela en el interior del establecimiento superado el horario de apertura permitido, dado que tuvo a gente en su local, con la puerta cerrada, hasta cerca de las tres de la madrugada.
Además, también ha sido denunciado por no colaborar con los agentes de la autoridad, que llamaron de forma repetida a la puerta del establecimiento, al escuchar voces en el interior del mismo, pero nadie les abrió la puerta.
Por superar el horario permitido por las autoridades sanitarias la propuesta de sanción es de 500 euros, pero por impedir el trabajo de inspección de los agentes puede llegar hasta los 60.000 euros, con el agravante de que este hostelero es reincidente en este tipo de conducta.