Los trabajos arqueológicos que se están desarrollando en el yacimiento de Penas do Castelo -en la parroquia de Salcedo-, en el municipio lucense de A Pobra do Brollón, han permitido desenterrar una muralla “monumental”, de unos seis metros de ancho por cuatro alto, en ese enclave, cuya datación va desde la Edad de Hierro hasta la alta Edad Media.

La campaña que ha permitido la realización de este hallazgo comenzó el pasado 23 de agosto, financiada por la Xunta de Galicia, en colaboración con el Ayuntamiento de A Pobra do Brollón, la comunidad de montes local y la Asociación Veciñal de Salcedo.

El yacimiento que está siendo objeto de estudio se encuentra, precisamente, a pocos metros del lugar en el que los servicios de extinción lograron detener el incendio que arrasó cientos de hectáreas a principios de semana entre los municipios de Ribas de Sil, Quiroga y a Pobra do Brollón.

Una muralla bien conservada

Los expertos que están participando en los trabajos arqueológicos aseguran que la altura original de la muralla desenterrada, que se encuentra “en un estado de conservación excepcional”, sería “incluso mayor de la que todavía se conserva”, de acuerdo con los “derrumbes retirados” durante la excavación.

La muralla está, además, rodeada por un sistema de fosos excavados en la roca de “enorme tamaño y espectacularidad”, informa el Ayuntamiento de A Pobra do Brollón, una percepción que se ve reforzada por la ubicación del yacimiento, “colgado sobre el río Lor”.

Antes de iniciar los trabajos, los arqueólogos querían dar “con las dos caras de la muralla, para poder tener una sección de la misma y comprender su sistema constructivo”, además de dejar a la vista “un recurso muy visual para las visitas”.

Pendiente la datación

Por otra parte, establecer “una datación del yacimientos es también otro de los principales objetivos de esta campaña arqueológica”, mediante la “toma de muestras, que serán analizadas mediante la técnica del Carbono 14”.