El circo Nevada, de Extremadura, que se vio obligado a permanecer en Monforte de Lemos (Lugo) desde el pasado mes de marzo a causa de las restricciones de movilidad instauradas por la pandemia, ofrece ahora funciones gratuitas para agradecer la solidaridad que los vecinos han tenido con ellos durante el confinamiento estricto.

La primera función gratuita tuvo lugar ayer, pero continuarán hasta la semana que viene por decisión de la familia propietaria, natural del municipio cacereño de Tarayuela, a donde esperan regresar tan pronto como lo permitan las restricciones impuestas a la movilidad con motivo del estado de alarma.

Trapecistas, malabaristas y payasos volvieron a ponerse de nuevo ante el público, casi tres meses después el obligado parón, para agradecer la solidaridad de los monfortinos durante el período de confinamento.

Cuando todo comenzó, este circo acababa de actuar en el municipio lucense de Monterroso y se había instalado en Monforte de Lemos con la intención de ofrecer allí su espectáculo.

Pero enseguida llegó el estado de alarma que prohibió los actos con público, se decretó el confinamiento de la población y quedó asimismo restriginda la circulación por las carreteras.

Desde el pasado 10 de marzo, las catorce personas que integran la plantilla permanecen en Monforte de Lemos.

“Nos hemos quedado sin trabajo”, reconoció en su momento la directora del circo, María Luisa Moreno. Entre las catorce personas que viajan con el circo hay tres menores de 5, 9 y 15 años, así como una anciana de 96.

María Luisa Moreno agradeció al inicio y ahora, la solidaridad de los monfortinos, porque “la gente del pueblo se ha volcado con nosotros".

“Todo el día trayéndonos alimentos. No tenemos palabras de agradecimiento. Por eso, trabajamos gratuitamente".

Todos están bien de salud y desde el Ayuntamiento de Monforte ha contactado con ellos con frecuencia para interesarse.