La diputada nacionalista Olaia Rodil recordó que el BNG llegó a un “acuerdo de investidura con unos compromisos, asumidos por escrito por el Gobierno español”, entre los que figuraba la búsqueda de una solución que garantizase la continuidad de la planta de Alcoa en A Mariña de Lugo.

“A partir de ese momento, empezamos otra vez de cero. Cualquier negociación futura está condicionada a que se cumplan los compromisos que el Gobierno español adquirió con el BNG y con los gallegos y gallegas”, dijo la diputada durante su participación en la manifestación de los trabajadores de Alcoa que tuvo lugar hoy en Lugo.

“Tiene que rectificar e incluir nuestras alegaciones”, insistió la diputada.

De hecho, reconoció que “el estatuto que ha presentado el Gobierno español es claramente insuficiente, no sirve para resolver el problema que tenemos encima de la mesa y que pone en riesgo más de 2.000 puestos de trabajo en la comarca de A Mariña”.

Por ello, dijo que el BNG seguirá “insistiendo en que el Gobierno español tiene que mejorar, y además tiene margen para hacerlo, el estatuto que presentó”.

“Tiene margen para garantizar un precio de la energía para las industrias electrointensivas que haga viable el mantenimiento de la producción de aluminio primario en nuestro país”.

En ese sentido, dijo que “además de apoyar las movilizaciones y de presentar alegaciones, seguiremos presionando y trabajando, también desde el Congreso de los Diputados, para que el gobierno español rectifique e incorpore esas alegaciones”.

En Marea

Por su parte, Pancho Casal, diputado de En Marea en el Parlamento, subraya que el estatuto presentado por el Gobierno es “el acta de defunción de toda la gran industria gallega”.

Al ampliarse “el margen para que puedan presentarse a esas ayudas más de 600 empresas”, las “empresas que de verdad son electrointensivas verán como baja su participación en esos fondos”.

“No entendemos el cambio. Alcoa así tiene los días contados”, zanjó.