El grupo provincial del Partido Popular de Lugo hizo balance este jueves de dos años de gobierno bipartito en la Diputación Provincial y su portavoz, Javier Castiñeira, aseguró en relación con la gestión de José Tomé (PSdeG), que “nunca un presidente hizo tan poco con tanto dinero” a su disposición”.

En la rueda de prensa, Castiñeira dijo que “Tomé le sale caro a la provincia”, porque “además de no adelgazar la administración con la extinción de Suplusa”, ha “incrementado el coste del personal de confianza con respecto a su predecesor en un 103%”, al tiempo que la “Diputación ofrece menos servicios”.

Acusó también al gobierno bipartito de practicar un “favoritismo laboral”, cuyo caso “más llamativo” fue la colocación en la Granxa Gaioso Castro como veterinarios al exconcejal en Lugo Daniel Piñeiro y a la exdiputada autonómica del PSdeG Sonia Verdes.

Además, lamenta que “mientras la red vial está totalmente desantendida”, el presidente pone “disculpas fantasiosas y habla de teorías de la conspiración” para calificar el “trabajo de la oposición como ridículo”, cuando en realidad “está llegando a la gente”.

Un gobierno lento

A su juicio, el gobierno provincial “es lento”, está “falto de diálogo y llega tarde a todo”, incluso al pago de sus propios proveedores, dado que algún mes superó “los 36 días, cuando la ley lo fija en 30 y la Xunta lo hace en 11”.

Fueron dos años, dijo Castiñeira, de “continuismo”, en los que el gobierno provincial estuvo más centrando en “atacar a Feijóo” y actuar con “sectarismo” que en gestionar los recursos de la provincia, dado que los ayuntamientos gobernados por el PP recibieron “vía convenios diez veces menos “fondos” que los del PSdeG y “cuatro veces menos que los del BNG”.

Sí se esmero el presidente de la institución, afirma el portavoz popular, en “contentar a su vicepresidenta”, la nacionalista Maite Ferreiro, quien “dijo que iba a luchar para vaciar de contenido a las diputaciones, porque en Lugo vemos que lo ha conseguido”.