Un vecino de A Mariña aceptó este martes una pena de dos años de cárcel y diez de libertad vigilada por un delito continuado de abuso sexual a la hija menor de edad de su pareja sentimental, una niña que en el momento de los hechos tenía 13 años.

El juicio iba a celebrarse hoy a puerta cerrada en la Audiencia Provincial de Lugo, pero finalmente hubo acuerdo de conformidad entre la defensa y la acusación.

El procesado tampoco podrá comunicarse o acercarse a la víctima durante un período de diez años y tendrá que indemnizarla con 8.000 euros por los daños morales que le provocó su comportamiento.

Los hechos

Según el escrito de acusación del ministerio público, los hechos ocurrieron en fechas indeterminadas entre los meses de mayo y julio de 2018, cuando el acusado, que convivía con ambas en el mismo domicilio, aprovechaba las ausencias de la madre para abusar de la niña.

El fiscal explica que le hacía creer que estaban jugando para tirarse encima de ella y hacerle cosquillas, momento que aprovechaba para meter sus manos por debajo de la ropa de la niña para tocarle los senos.

Una conducta que, según el ministerio público, llegó repetir el acusado en al menos seis ocasiones, dado que aprovechaba que el grado de madurez de la niña no le permitía conocer el alcance de esa forma de actuar.

Esa situación ha provocado en la adolescente ansiedad, malestar emocional y problemas de autoestima.

El fiscal pedía inicialmente cinco años de prisión para el acusado.