Lugo, 22 de mayo.- Rubén Arroxo vuelve a encabezar la lista del BNG para las elecciones locales, después de su primera incursión en la política municipal, que tuvo lugar en el año 2015, cuando fue designado para ser el candidato del partido nacionalista a la Alcaldía de Lugo en un momento complicado para la formación política.

A pesar de su juventud y de los malos resultados que en aquel momento vaticinaban los sondeos de opinión, Arroxo logró mantener la representación del BNG en la corporación municipal de Lugo, dos concejales, que ahora aspira a doblar en sus segundos comicios como candidato a la Alcaldía, porque aprecia una “una corriente de simpatía” creciente hacia las siglas de su partido en el ámbito local.

Este arquitecto técnico de 33 años de edad es un gran aficionado al atletismo y, de hecho, es habitual verlo competir en las pruebas deportivas que se celebran en el municipio de Lugo, pero también le gusta practicar la escalada y el senderismo, al tiempo que cuenta actividades como la lectura o la apicultura entre sus aficiones.

Aunque realizó diversas colaboraciones como arquitecto técnico, su vida laboral estuvo siempre vinculada al deporte, dado que fue monitor en diferentes clubs y centros escolares, mientras que su trayectoria política, al menos en la primera línea, se circunscribe a los últimos cuatro años como portavoz del BNG en el Ayuntamiento de Lugo, dado que anteriormente había sido responsable comarcal de Galiza Nova.

De hecho, Arroxo se inició al activismo político con su participación en los movimientos estudiantiles de la Universidade de A Coruña, hasta que se integró en la organización juvenil del BNG, lo que también le abrió la puerta a la colaboración en la propia actividad del partido nacionalista.

Arroxo se considera parte de una generación “muy formada”, pero también la que probablemente “menos posibilidades tuvo para desarrollar los conocimientos adquiridos en su formación”.

De trato afable, es habitual verlo por la ciudad, precisamente porque le gusta desplazarse a pie o en bicicleta a todas partes, y en el programa electoral con el que concurre a estas elecciones apuesta por un modelo urbano “amable para las personas”, con la peatonalización del casco histórico y el entorno de la Muralla libre de coches.

En el mandato que está a punto de finalizar, la postura de su grupo forzó la retirada de José López Orozco a cambio de apoyar la investidura de otra socialista, Lara Méndez, con la que al final no llegó a un acuerdo para conformar un gobierno de coalición.

Después de cuatro años en la oposición, los resultados de estos comicios determinarán si esa decisión fue o no la más acertada desde el punto de vista político para el BNG de Lugo.