Los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, junto con agentes de la Policía Autonómica y Local, intensificarán los controles en la ciudad de Lugo y en sus principales accesos para garantizar el cumplimiento de las restricciones decretadas por las autoridades sanitarias para tratar de frenar los casos de Covid-19 en el municipio.

De hecho, fuentes de la Policía Autonómica confirmaron a Cope Lugo que la unidad adscrita desplegará a partir de hoy un dispositivo especial de vigilancia en el entorno de la ciudad de Lugo que estará compuesto por siete patrullas, de modo que participarán en el mismo un total de 15 efectivos.

De ese modo, participarán en el dispositivo de vigilancia durante las 24 horas del día, con especial incidencia en los horarios de mañana y tarde, aunque también habrá una patrulla de guardia por la noche.

En cuanto a los controles, las mismas fuentes indicaron que los agentes de la Policía Autonómica vigilarán en entorno de la ciudad, pero también se desplazarán a los municipios limítrofes e incluso hasta Sarria.

Fuentes de la Subdelegación del Gobierno explicaron que la Guardia Civil y la Policía Nacional están realizando controles “desde el primer momento”, para garantizar el cumplimiento de las medidas decretadas por las autoridades sanitarias, y hoy mismo sus mandos participarán en la reunión semanal para coordinar el dispositivo de vigilancia.

En los últimos días, ya se percibió por parte de los usuarios de las vías por las se accede o se sale de Lugo, especialmente en la Nacional VI, que cumple también una función como vía de circunvalación a su paso por la ciudad, de una mayor presencia policial, especialmente de controles de la Guardia Civil.

También la Policía Local controla la procedencia de los conductores que acceden al casco urbano, así como el destino de aquellos que quieren dejarlo.

Se cumplen quince días desde que las autoridades sanitarias ordenaron el cierre perimetral del municipio y la clausura temporal de la hostelería, pero la evolución de la pandemia no ha sido la esperada y los contagios han seguido subiendo.

De hecho, el gerente del Sergas en Lugo, Ramón Ares, reconoció que la situación en la ciudad es “muy preocupante”.