Agentes de la Policía Local de Lugo detuvieron a un adolescente, un joven de 16 años de edad, en un centro comercial de la ciudad, por hurtar teléfono móvil con un valor de 1.379 euros.

Además, los agentes informaron a los padres de otro menor que lo acompañaba, un niño de 13 años de edad.

Los hechos sucedieron el pasado 25 de junio, sobre las 16:30 horas, cuando una patrulla de la Unidade Territorial de Policía de Barrio fue alertada a través de la sala operativa del 092 de que los vigilantes de seguridad del centro comercial estaban forcejeando con dos chavales, como consecuencia de un supuesto hurto en el interior del establecimiento.

Al llegar, los agentes vieron como los vigilantes perseguían a un joven, por lo que se sumaron a la persecución y le dieron alcance en las proximidades de un área recreativa cercana al centro comercial.

Saltó la alarma

Los vigilantes se percataron de que los dos chavales tenían una “actitud sospechosa” y al pasar por la línea de caja, se activó la alarma acústica del móvil que pretendían robar.

Aunque consiguieron quitarle el teléfono, el joven detenido logró zafarse de los vigilantes y, tras fracturar dos puertas de la entrada principal, huyó a la carrera del centro comercial, hasta que fue alcanzado por los policías que lo arrestaron por un supuesto delito de hurto.