El presidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, José Antonio Quiroga, confirmó que el organismo de cuenca iniciará la próxima semana una intervención de “emergencia” en uno de los principales “caneiros” del río Miño a su paso por la ciudad, concretamente el conocido como Caneiro do Muiño, cuyo deterioro está influyendo en el barrio de A Ponte.

Quiroga hizo este anuncio después de la “reunión de trabajo” que mantuvo esta mañana con la alcaldesa de la ciudad, Lara Méndez, “encartada en la colaboración institucional, que es muy importante” y que ambas administraciones “vienen manteniendo desde el primer momento”, precisó.

“Mi presencia viene dada por la necesidad de darle cuenta de una actuación que tendrá lugar a partir de la semana que viene”, dijo Quiroga, quien precisó que se trata “de una medida de protección de la ribera en el barrio de A Ponte”, porque se “está socavando como consecuencia del deterioro del Caneiro do Muiño”.

“Es un motivo de preocupación muy importante, dado que afecta a muchos aspectos colaterales, que son importantes para Lugo”, dado que contribuye a mantener el nivel de agua para la práctica de deportes acuáticos en el río Miño.

Recordó que la recuperación de ese “caneiro” está todavía pendiente de una decisión judicial, dado que “se está con la solicitud de reversión del caneiro y del molino” en la sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional y, aunque ya hubo “una primera sentencia favorable a la Confederación”, sus propietarios han presentado recurso.

“Para ese caneiro tenemos desde hace un año un proyecto, con 308.000 euros, para restaurarlo por completo, dado que es vital para la ciudad”, pero en este momento y a la espera de la correspondiente decisión judicial, la Confederación construirá una escollera de 36 metros de largo y cuatro de alto, en pleno cauce del río, para evitar que continúe su deterioro, con una inversión de 85.000 euros.

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Por lo demás, en relación con esa reunión de trabajo, la alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, aseguró que el gobierno local está ya en la “última fase” de tramitación para la creación de una “zona pública de baño” a orillas del río Miño a su paso por la ciudad, dado que en este momento está “a punto de conseguir el último permiso, el definitivo” para que “sea una realidad”.

La alcaldesa confía en que el próximo verano los lucenses puedan ya “gozar de esa infraestructura” de ocio.