Este lunes comienza una campaña especial de la DGT de vigilancia de las condiciones en las que circulan los vehículos. Su objetivo es garantizar que su estado cumple con los requisitos establecidos en la legislación vigente.  
Durante toda la semana, hasta el domingo 26 de enero incluido, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil intensificarán los controles para comprobar las condiciones técnicas, prestando especial atención al adecuado mantenimiento y puesta a punto de todos los elementos de seguridad del vehículo, como neumáticos, luces, señalización o parabrisas.
 
RELACIÓN ENTRE RIESGO Y ANTIGÜEDAD
Hay en los últimos años una tendencia al progresivo envejecimiento del parque de turismos (en el caso de los registrados actualmente en Galicia, su edad media supera los 10 años). La antigüedad supone un factor de riesgo, al carecer los vehículos de los sistemas y equipamientos de seguridad implantados más recientemente, además de sufrir problemas derivados de su uso prolongado.
 
Según los datos de la DGT en Galicia, un 62,5% de los accidentes de tráfico registrados en las carreteras gallegas en 2018 tuvieron como portagonistas a vehículos de más de 10 años. En el lado contrario, solo un 17% lo fueron de vehículos de menos de 4 años.
Además, el riesgo de fallecer o resultar herido grave se multiplica por dos al comparar los accidentes ocurridos con vehículos de 10 a 15 años de antigüedad en relación con otros en los que los vehículos implicados tenían menos de cinco años.
 
CAMPAÑA DE NOVIEMBRE DE 2019
En la última campaña de control de condiciones de vehículos que se desarrolló en Galicia el pasado mes de noviembre, los agentes de la Guardia Civil controlaron 9.851 vehículos en los controles específicos. En total impusieron 188 denuncias, de las que el 62,8% (118) lo fueron por irregularidades con la Inspección Técnica de Vehículos.

¿CÓMO DEBEN ESTAR LOS VEHÍCULOS?

1. Neumáticos. Aproximadamente un 5% de los vehículos circula con defectos graves en las ruedas, principalmente por llevar una profundidad por debajo del mínimo legal de 1,6 milómetros, por tener un desgaste irregular debido a una mala suspensión o alineación incorrecta o por circular con una presión erróena. El límite es de 1,6 mm de profundidad en las ranuras, pero lo recomendable son 3 mm.
2. Alumbrado. Las lámparas van reduciendo su intensidad, con el uso, por lo que deben cambiarse cada 40.000 kilómetros o a los dos años. Se deben cambiar de dos en dos y hay que mantener siempre limpias las ópticas de faros y pilotos.
3. Matrículas y documentación. Las placas de matrícula deben ser perfectamente legibles y no estar deterioradas. No supone la pérdida de puntos, pero llevar una matrícula ilegible es una infracción grave. Por otro lado, manipular la placa de la matrícula puede suponer una multa de 6.000 euros y la pérdida de seis puntos. En cuanto a la documentación del vehículo, además del preceptivo permiso de conducir, se debe llevar el permiso de circulación, en el que figuran los datos técnicos y datos de su propietario, así como la tarjeta de la ITV y el adhesivo visible.