Es una de las incógnitas que está sin despejar durante las últimas horas en el Ayuntamiento de Ferrol en donde representantes de la junta de personal y del comité de empresa han anunciado que han traslado a las asesorías jurídicas de los sindicatos CSIF, CIG y UGT la posible presentación de una denuncia por un presenuto delito de detención ilegal. Así lo anunciaba este mediodía el presidente de la junta de personal, Javier Sandá, durante una rueda de prensa en la que comparecía con el resto de representantes sindicales, y en donde aseguraba que este encierro, contra su voluntad, son hechos muy graves.

Los delegados de los trabajadores del Ayuntamiento de Ferrol denunciaron el encierro al que fueron sometidos en el mediodía de ayer, durante aproximadamente una hora, en el despacho de Alcaldía.

Aseguran que no saben quien fue el encargado de girar la llave desde el exterior del despachó cuando ellos se encontraban dentro, sin posibilidad de salir al exterior, con el baño de la Alcaldía también cerrado con llave, lo que les impedía realizar sus necesidades fisiológicas.

Fani Gómez, delegada de CSIF, asegura que tras una hora de encierro, y con la mediación del jefe de la Policía Local, se les abrió la puerta y ellos de manera voluntaria abandonan el local, criticando la delegada de la junta de personal la nula voluntad negociadora del alcalde, a pesar de alardear de ella

Desde la junta de personal y comité de empresa aseguran que lo que busca el regidor es la confrontación entre empleados públicos y que Jorge Suárez no asume ningún tipo de responsabilidad y trasladando la misma a los trabajadores.

¿Y ante estas acusaciones que dice el alcalde?. Pues que él no fue el que pasó la llave ni que tampoco ordenó realizar esta acción. Preguntado por si tiene previsto abrir una investigación por este suceso, asegura Suárez, que le parece excesivo y que están sacando las cosas de contexto.

Además, asegura Jorge Suárez que en los más de tres años y medio que lleva al frente de la Alcaldía nunca ha tenido ningún conflicto con ningún trabajador, que nunca dio ninguna orden de encerrar a ninguno y estima que judicializar las diferencias entre gobierno y representantes de los trabajadores no lleva, según Suárez, a ninguna parte, aunque dice que la respeta.