El sindicato CIG-Industria anima a participar este jueves 13 de febrero  en la concentración que se va a realizar a las 10.3 0 horas, delante de las puertas de los astilleros de Ferrol y de Fene para reclamar carga de trabajo inmediata y un plan estratégico a largo plazo que finalice con la dependencia de la construcción militar y la periódica expulsión del personal de las auxiliares al paro.

En la concentración  también se votará el calendario de movilizaciones, propuesto por la CIG, que aboga por repetir protesta todo los jueves de cada semana, alternando concentraciones con manifestaciones en distintos recorridos.

RESPONSABILIDAD DEL GOBIERNO ESPAÑOL

Desde  CIG-Industria insisten en la necesidad de apostar por estos "Xoves do Naval " e intensificar las medidas de presión "porque tenemos 1.840.000 motivos para movilizarnos". Con esta cifra, la central sindical alude a los metros cuadrados que ocupan las instalaciones de Navantia en ambas orillas de la Ría de Ferrol y que, comparadas con otras infraestructuras empresariales de la comarca, superan la superficie que tiene, por ejemplo, el Polígono de Río del Pozo.

Pero además, no hace falta olvidar que estos 1.840.000 m2 son de titularidad pública estatal, y por lo tanto, el Gobierno español tiene una doble responsabilidad: la propia de cualquier Administración en la defensa de los empleos y del tejido industrial y, en el caso de Ferrolterra, como principal empresa de la comarca. 

En este sentido, subrayan que la reivindicación más urgente es la demanda de carga de trabajo para evitar la caída en la ocupación que se va a producir en breve. Esta reclamación se concreta, a día de hoy, en un buque de aprovisionamiento para la armada española, o en evitar que la reparación del Blue Star (el buque que encayó en la ría de Ares) se haga en otro astillero. 

SUPERAR LA DEPENDENCIA DE LA CONSTRUCCIÓN MILITAR

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La  CIG también  defiende la necesidad de contar con un plan estratégico a largo plazo "que finalice de una vez por todas con la dependencia del sector militar, con el  vaciamiento de gradas, y con la consecuente y periódica expulsión del personal de la industria auxiliar al desempleo o a la emigración".

La central nacionalista lleva años advirtiendo de que esta dependencia puede poner en riesgo la propia viabilidad de Navantia como proyecto industrial y demandando la creación de un Complejo Integral de la Construcción Naval, recuperando actividades como la construcción civil y apostando seriamente por fortalecer otras actividades como grandes reparaciones, la eólica marina o turbinas.

Pero para avanzar en este camino "es preciso que llamemos la atención del Gobierno español y lo obliguemos a cambiar la improvisación por planificación a largo plazo; a cambiar las ayudas y los planes comarcales, de los que nada más que se aprovechan empresas como Poligal, por inversiones reales en mejorar los astilleros, e inversiones en innovación. Tenemos que obligarlos a cambiar la política de todos estos años de reducir capacidades por otras dirigidas a recuperar actividades y mercados".

La CIG-Industria entiende que solo a través de la movilización continuada y de la presencia constante en las calles se conseguirán estos objetivos.