El departamento de obras de San Sadurniño llevó a cabo en febrero una inspección del alcantarillado de Marqués de Figueroa para detectar los puntos donde se estaban produciendo atascos y filtraciones. Aquel trabajo se hizo con un vehículo teledirigido que no solo ayudó a ver los problemas internos de la red, sino que también permitió localizar acometidas domiciliarias para las que hace 30 años, cuando se hizo la primera gran reparación de la avenida, no se dejaron registros en superficie.

Ahora que se conoce su localización exacta el Ayuntamiento puede darles una solución, para lo cual se están llevando a cabo distintas actuaciones en los números más bajos de la avenida, concretamente entre el antiguo cuartel de la Guardia Civil y el colegio público.

El departamento de Obras y Servicios encargó que en ese trazado se efectuaran varias catas para sacar a la luz las tapas de los registros y hacer desde ellas las labores de desatascado de la red. Los trabajos comenzaron la semana pasada y obligaron a cortar la avenida entre el CPI y la calle que da al gimnasio del centro escolar.

Además de limpiar las alcantarillas también se aprovechará para instalar nuevas tapas del alcantarillado en superficie, lo que permitirá en el futuro solventar de inmediato cualquier problema que se produzca en las canalizaciones.

Sin embargo, el regidor Secundino García, señala que los trabajos en marcha servirán para "hacer un plano detallado de la red y corregir chapuzas del pasado, de manera que quien gestione el Ayuntamiento en el futuro dispondrá de una guía de referencia precisa sobre cómo están las cosas, evitándole tener que andar solucionando los problemas casi a ciegas, como nos ocurrió a nosotros en este caso".

Se espera que las obras finalicen a mediados de esta semana echando una nueva capa de aglomerado en los tramos de vía afectados y restaurando los fragmentos de acera donde fue preciso actuar.