El "Bosque Mágico" está situada precisamente en el espacio destinado a representar este tipo de bosque autóctono, aprovechando una zona de campo que quedaba libre muy cerca de donde se encuentra la estatua de la Deusa Navia -obra también de Carlos García- y del legendario Pozo dos Donceis, en San Sadurniño.

Son varias piezas hechas en madera que ejemplifican a la perfección el universo creativo del polifacético artista y su querencia por los duendes, gnomos, dragones y animales de fábula que aquí se presentan en gran tamaño. Todos tallados con motosierra a partir de troncos secos de roble, castaño, ciprés y acacia. Según comenta Carlos García, hizo falta un mes para localizar la materia prima y después otros tres de intenso trabajo "pelando, cortando, puliendo, ensamblando..." sin contar las horas invertidas para convertir este grande rompecabezas de leños y tablas en una escena que fuera realmente mágica.

Tanto él como Marina Goti -la otra mitad de 2Duendes- tenían claro lo que les había encargado el Ayuntamiento, pero llevarlo a la práctica era cosa distinta. Ahí entraron en juego el arte espontáneo de García y la busca de las formas que sugería la propia madera. "Primero compramos los troncos y después los preparamos. No fue nada planeado, las figuras fueron surgiendo. Siempre trato temas infantiles, de cuento... por eso pusimos el dragón, el lagarto, el gusano... cosas que le gustan tanto a niños como a mayores. Los trabajos van saliendo según se van haciendo... y con la inspiración, claro. De noche, incluso durmiendo, discurrimos cosas y por la mañana se hacen, no hay un planning pensado", explica García.

Marina, por su parte, resume a la perfección el sistema de trabajo de su compañero de vida y proyecto empresarial, del que ella también está contagiada: "cuando teníamos los troncos parados, lo único que veíamos eran lagartijas por todos los lados. Un día fui a hacer el almuerzo y cuando volví ya estaba hecho el lagarto, luego apareció una rata... Carlos no vale para proyectos, se le ocurre una cosa y tiene que hacerla".

Tanto Goti como García se muestran satisfechos con un resultado que también cumplió las expectativas del Ayuntamiento. Así lo expresó el responsable de Desarrollo local y de todo lo que tiene que ver con el turismo, Manolo Varela. "Solo puedo decir que la satisfacción con el trabajo es plena. Hay confianza en Carlos, sabemos que es una garantía porque pone en el trabajo todo su alma. Y el resultado ahí está".

La "Fraga Máxica da Cortiña" es ya una realidad "hecha para durar" habida cuenta de los materiales utilizados. "Pasarán los años, yo igual ya no estaré, pero las figuras seguirán aquí", aseguraba Carlos García.

El proyecto supone una inversión municipal de 13.995 euros, IVA incluido, y se espera que no sea la última actuación que se lleve a cabo en la zona de la Finca para incrementar su valor ambiental y como espacio de ocio.