Trabajadores de Alu Ibérica en A Coruña han cortado este jueves desde mediodía el tráfico en la avenida Alfonso Molina, en la ciudad herculina, en demanda de una solución a la factoría, que se encuentra en concurso de acreedores. La circulación estivo totalmente cortada en dirección salida, a la altura del Edificio de Sindicatos, hasta las 13:05l

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Os traballadores do aluminio da Coruña seguimos loitando pola reactivación dunha actividade esencial!! #Aluibéricanonsepecha!! pic.twitter.com/3IcnVeYxDs

— Traballador do Aluminio Galego (@Traballalcoruna) January 27, 2022

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Los operarios también han quemado neumáticos, en una protesta que causó retenciones al menos hasta la zona de las Pajaritas. Los Bomberos limpian los restos que han quedado en la calzada.

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Cortada a Avenida de Alfonso Molina en dirección saída da Coruña (na entrada da AP9), por unha protesta. O fume é dos pneumáticos que están queimando. @silcerino@EloyTPpic.twitter.com/XddKSGpf7F

— Galdramaður (@Galdramadur) January 27, 2022

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SITUACIÓN CRÍTICA

La acción sorpresa tiene lugar después de que la plantilla de Alu Ibérica haya decidido en asamblea esta mañana el inicio de movilizaciones en protesta por la situación que viven. Según fuentes del comité de empresa, la situación es “crítica”.

Ven necesario el incremento de presión ante la “pasividad y abandono de las administraciones paRa una solución industrial y laboral al escenario actual de concurso de acreedores”. Critican al Ministerio de Industria por “no dar señales” respecto de un encuentro prometido para esta semana donde supuestamente “iban a aportar las inversiones al plan industrial del cuaderno de ventas, vincular un contrato a a la planta, y financiación para la activación de la planta”, señalan desde la representación sindical de Alu Ibérica.

HASTA EL 10 DE MAYO PARA EVITAR LA LIQUIDACIÓN

Dos empresas han mostrado interés por las instalaciones de la planta de aluminio que perteneció a Alcoa, ahora intervenida judicialmente. Así lo transmitió días atrás el gobierno a los trabajadores.

Se intentará que se primen las ofertas que conserven la mayor parte de puestos de trabajo, aunque Industria aseguró que buscará una empresa de recolocación si alguno queda fuera. El tiempo corre en contra, aunque hay margen. El administrador judicial da de plazo hasta el 10 de mayo. Si para entonces no hay comprador, solicitará la liquidación.