La Policía Nacional ha detenido en A Coruña a dos fugitivos internacionales buscados por asesinato y blanqueo de capitales, respectivamente. Sus países de origen, Venezuela y Colombia, los reclamaban desde 2016.

Ambos ejercían profesiones normales en la provincia. Fueron arrestados por la policía en las inmediaciones de sus domicilios, en la vía pública y sin incidentes, según relata el 091.

UN HOMBRE “VIOLENTO” QUE TRABAJABA COMO REPARTIDOR

Uno de ellos era un hombre que estaba siendo buscado en Venezuela desde 2016. Ese año, presuntamente, interceptó y amenazó a un viandante en la vía pública, lo llevó a una vivienda para reclamarle dinero y lo disparó varias veces hasta la muerte. Posteriormente, junto con el propietario de la casa, lanzaron el cuerpo sin vida a una vía poco transitada y desaparecieron sin dejar rastro.

Los investigadores determinaron que el fugitivo, catalogado como “armado, peligroso, propenso a la evasión y violento” estaba en España. Pudieron concretar que residía en A Coruña y trabajaba como repartidor en motocicleta. Ahora, se enfrenta a una pena máxima de 25 años de cárcel.

BLANQUEÓ CAPITALES EN COLOMBIA

La otra persona arrestada es una mujer buscada por la justicia de Colombia desde 2016. Los hechos ocurrieron en la ciudad del Cali Valle del Cauca. A través de varias empresas donde trabajaba y con la ayuda de terceros, presentaba vehículos para su destrucción y falsificaba documentos en los que se adulteraba la capacidad de carga.

De este modo, la mujer hacía un cambio irregular de servicio particular a privado para hacerse con los beneficios económicos que brinda el país colombiano por la destrucción de coches. Mediante este sistema, defraudó 1080 millones de pesos (unos 239.000 millones de euros), cita la Policía Nacional, unos hechos por los que podría ser condenada a 30 años de prisión.

En un primer momento, los investigadores sospecharon de que esta persona se podría ocultar en Ourense, pero posteriormente la localizaron en A Coruña. Estaba en una zona rural “extremadamente aislada”, donde utilizaba un trabajo de asistenta domiciliaria como cobertura.