El Deportivo es líder y ha ganando en el campo de dos rivales directos como en Las Gaunas ante la UD Logroñés y en el Cerro del Espino frente al Rayo Majadahonda. Son sólo trece jornadas de liga pero el equipo coruñés da muestras de gran solidez y de tener las ideas muy claras. Por ello, el reto blanquiazul es ser campeón y regresar al fútbol profesional de forma directa: “El equipo quiere ser líder. Es verdad que jugar play off es un logro pero cambia mucho el subir directo. En un play off puede pasar cualquier cosa. El objetivo es quedar primero y subir directos”.

El central, un fijo en los planes de Borja Jiménez, considera que el grupo todavía no ha tocado techo: “El equipo tiene fuelle de sobra y vamos a dar mucho más. Queremos seguir ganando partidos y siendo líderes”.

Jaime fue uno de los protagonistas del triunfo del Deportivo en el Cerro del Espino ante el Rayo Majadahonda. Protagonista involuntario, eso sí. Marcó el propia puerta: “Fue mala suerte. Es un balón que va muy fuerte. Es difícil que entre un balón así. Es mala suerte y queda en una anécdota”.

La plantilla, después de disfrutar de un día de descanso, regresó a los entrenamientos en la ciudad deportiva de Abegondo para empezar a preparar el siguiente compromiso liguero, que será el domingo a partir de las cinco de la tarde en Riazor ante el Athletic de Bilbao B. El conjunto vasco está en la parte baja de la clasificación, pero en el vestuario huyen de cualquier tipo de confianzas porque son equipos capaces de lo mejor y de lo peor: “Cuando te enfrentas a un filial nunca sabes lo que te vas a encontrar”, cuenta un Jaime que formó parte del plante del filial del Real Madrid