La propuesta de descenso administrativo del Fuenlabrada formulada por el Juez Instructor no es el final del camino del Caso Fuenlabrada. Ni mucho menos. Quedan varios capítulos. Hay, en estos momentos, dos casos abiertos: uno, la referida propuesta del instructor y otro, un conflicto de competencias pendiente de resolverse en el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD). Empezamos por este último, porque de su resolución depende el otro. El TAD debe decidir quién es el competente para juzgar las supuestas irregularidades del club que preside Jonathan Praena. Si la decisión es favorable a la Liga de Fútbol Profesional, el Comité de Competición debería archivar la propuesta del Juez Instructor al no ser competente para juzgar el caso, que correspondería a la LFP, que ya ha dejado claro, a través de su Juez de Disciplina Social, que el Fuenlabrada no ha hecho nada malo y que cumplió el protocolo. En este caso, el Dépor tendría bloqueada la justicia deportiva y tendría que acudir a la ordinaria para seguir con el caso. "Es una resolución fundamental. Es la que determinará la legimitación del Comité de Competición. Es una cuestión jurídica compleja. Lo que tiene que determinar es si estamos en el ámbito de la competición o no, si lo que ha vulnerado el Fuenlabrada está dentro de la competición o son normas internas de la Liga", indica Miguel Taboada, exasesor jurídico del Deportivo.

Si el TAD da competencias al Comité del Competición, el caso Fuenlabrada será tratado primero por Competición y, seguramente, por Apelación y el propio TAD, puesto que cabrían recursos ante estas dos instituciones.

El problema del tiempo

Actualmente, estamos en periodo de alegaciones a la propuesta del Juez Instructor. Hay diez diaz hábiles. Si se agotan los plazos, Competición no podrá resolver antes de finales de agosto o principios de septiembre. Esto supone que estarías a días del inicio de la Liga en Segunda División (la LFP quiere comenzar el 12 de septiembre). Antes, se tendría que sortear el calendario, por ejemplo. De todos modos, el fallo de Competición sería recurrible ante Apelación, por lo que la decisión definitiva (aún quedaría el TAD) puede darse con la competición en marcha. Por ello, desde el Dépor estudian la opción de pedir una suspensión cautelar para que la Liga en Segunda no se inicie hasta que se resuelva el Caso Fuenlabrada.