A Coruña, 22 nov (EFE).- El Deportivo cerró el último ejercicio contable, el de la temporada pasada en Segunda B, con más de once millones de pérdidas, un déficit que pretende contrarrestar con la inyección de un préstamo participativo que suscribirá con su máximo accionista, la entidad financiera Abanca.

Las cuentas que facilita el club a sus accionistas para la Asamblea del próximo 22 de diciembre, a las que ha tenido acceso Efe, reflejan 11,44 millones de euros en negativo en el balance del Deportivo en su vuelta al fútbol no profesional tras casi cuarenta años consecutivos en las dos principales categorías del fútbol nacional.

Esas pérdidas serán compensadas por un préstamo participativo que el Consejo de Administración someterá a la aprobación de los socios en la Junta de Accionistas del mes que viene y que será suscrito con Abanca, según se desprende del Orden del Día de la Asamblea.

La cifra de negocio del club en el ejercicio que se cerró el pasado 30 de junio fue de 4,65 millones de euros, de los que 1,45 millones procedieron de sus abonados a pesar de ser un año sin público en la grada o aforo muy limitado en la mayor parte de los encuentros.

En cuanto a los gastos, 9,43 millones se dedicaron al personal del club y, de esa cantidad, 7,42 correspondieron a la plantilla deportiva.

El Deportivo tenía a la conclusión de la temporada pasada una deuda de 51,58 millones a largo plazo y 5,52 a corto.

Con todo, su patrimonio neto, que sigue siendo negativo (50,14 millones), mejoró en más de 23 millones después de que Abanca convirtiera en acciones 35 millones de euros de deuda que el Deportivo había contraído con este banco, lo que le convirtió en dueño del club con cerca del 80 por cien del capital social.

En la temporada en curso, la 2021/22, el Deportivo cuenta con un presupuesto, de acuerdo a la información que se facilita a los socios, de 6,5 millones de euros en Primera Federación y estima que cerrará el ejercicio contable el 30 de junio de 2022 con pérdidas de 1,45 millones, muy por debajo de las pérdidas del curso anterior. EFE