El 'Caso Fuenlabrada' no sólo ha tenido, y tiene, consecuencias en el ámbito futbolístico. Mientras el Deportivo sigue sin saber a 26 de agosto en qué categoría jugará la próxima temporada, lo cierto es que todo lo ocurrido ese lunes 20 de julio y en los días posteriores ha influido negativamente en la economía de la ciudad de A Coruña. “El efecto Fuenlabrada fue muy mediático, para lo bueno y lo malo. Sí tuvo impacto en la ciudad y se fue arrastrando al resto de noticias que se fueron dando. Por eso haremos un planteamiento un poco más duro de lo esperado”, analiza en COPE CORUÑA Richard Huerta, presidente en funciones de HOSPECO (Asociación de Hospedaje de A Coruña). El mismo lunes, sin ir más lejos, en cuanto se supo que existía un brote de COVID 19 en la expedición del cuadro madrileño, hubo personas que decidieron cancelar las habitaciones que tenían en el hotel donde se hospedaban los jugadores y el cuerpo técnico que encabezaba José Ramón Sandoval. El equipo se tuvo que quedar aislados en sus habitaciones durante varios días, momentos en los que el foco mediático se situó en la ciudad de A Coruña. Incluso la alcadesa, Inés Rey, llevó el asunto a la Fiscalía al entender que pudo producirse una negligencia en el cumplimiento de los protocolos sanitarios. “No busco protagonismo, defiendo a mi ciudad”, indicó una Inés Rey que se ha mostrado siempre muy clara con respecto al Caso Fuenlabrada

A la espera de la reunión CSD-RFEF-LFP

Lo que ocurra en esa cita prevista para mañana jueves a partir de las cinco de la tarde puede dar la primera pista del futuro del Dépor desde el punto de vista deportivo. En la Plaza de Pontevedra tienen claro que van a defender sus intereses hasta el final porque consideran que se han vulnerado sus derechos. Además, el viernes termina el plazo para presentar alegaciones a la propuesta realizada por el Juez Instructor de descenso administrativo del Fuenlabrada