La Diputación de Cáceres ha adquirido 174 cabras jurdanas a un pastor mayor de El Gasco, con el que se acababa ya una generación de pastores y se corría el riesgo de terminar con esta raza y es que éste es el último rebaño de cabras hurdanas de la provincia. La Institución Provincial trabajará ahora en la mejora genética de esta especie estudiando los mejores ejemplares de modo que se pueda conservar y reproducir la raza.

Un trabajo que se realiza desde el Área de Agricultura y Ganadería de la Diputación, en coordinación con la UEX y el Grupo Mosaico para evitar la extinción de la raza y apoyar a los ganaderos con una posterior oferta, junto con las razas de ovino y bovino con que cuenta la Institución.

El rebaño de cabras ya ha sido trasladado hasta Pinofranqueado donde el ayuntamiento de la localidad aporta el personal y las infraestructuras necesarias para este trabajo. Se trata así de “recuperar la raza jurdana y que ésta vuelva a pastar por estos árduos terreros” ha destacado la diputada de Agricultura y Ganadería de la Diputación, Angélica García, ayudando así, entre otras cosas, a evitar la propagación de incendios y a fijar población en el medio rural.

La Diputación de Cáceres adjudica, a precios subvencionados, reproductores, machos y hembras, de especies y razas como las razas bovinas Blanca Cacereña, Avileña Negra Ibérica y Raza Charolesa, y la raza ovina de Merino Precoz. A estas se sumará, tras el trabajo de trabajo de investigación, la raza Caprina Jurdana.