Desde el inicio del toque de queda el pasado 25 de octubre, las sanciones por botellón han disminuido hasta convertirse en algo residual, al tiempo que se disparan las sanciones por fiestas privadas de más de 6 personas. En las últimas semanas se han desalojado 144 fiestas con más personas de las permitidas y que no guardaban medidas de seguridad: se dieron 7 en octubre y 137 en noviembre.
Aarón Cano, concejal de protección ciudadana, añade además que desde el estado de alarma se han propuesto 1051 sanciones a locales así como suspendido la actividad a varios. Uno de ellos, en la Marina, que hubo que desalojar, y otros 2 de los que se desalojaron unas 150 personas. Por lo que respecta al resto de locales sancionados, se han dado por varios motivos: por no cumplir con el aforo, tampoco con los horarios, por no mantener la distancia entre las mesas y por permitir fumar en las mesas.
En cuanto a las propuestas de sanción por no llevar mascarillas o no llevarlas correctamente, desde junio a noviembre las sanciones ascienden a 15.194.
Con respecto a las infracciones por no cumplir con el toque de queda, estas ascienden a 711: 197 en octubre y 514 en noviembre.