La selectividad más inusual de todos los tiempos terminó ayer mucha controversia y con muchas quejas por parte de los estudiantes. El problema se debió a errores en los enunciados y en los textos propuestos, que tuvieron que ser correguidos con el examen ya iniciado.

Las quejas de los de los estudiantes se viralizaron en las redes sociales. Se podía leer comentarios como: "hasta los profesores de los tribunales estaban avergonzados de los errores que había" y otro como "el que haya hecho el examen no se ha enterado de que estamos en 2º de Bachillerato y no en la carrera de Filología". Por otro lado los alumnos tambien se quejaban por las "constantes interrupciones" para correguir los enunciados, lo que restaba tiempo de examen.

Los exámenes más afectados fueron el de Latín y el de Historia de España. En el primero se detectaron erratas en uno de los textos propuestos (de Salustio), en el enunciado de uno de los ejercicios y errores en el léxico que acompaña al examen y que sirve de apopyo a los estudiantes. En el caso del examen de Historia de España, la pregunta estaba mal redactada ya que se pedía a los alumnos que desarrollaran el reinado de Isabel II con unas fechas que no correspondían con dicho periodo.

Una de las escepciones de este año es que no había un especialista en la materia en cada una de las clases, por lo que en muchos casos las aclaraciones se tenían que comunicar por teléfono para que los profesores que se encotnraban en los centros las trasladaran a los alumnos. Por otro lado la Conselleria de Universidades quiso solventar la situacion alegando que "los errores han sido mínimos y resueltos en el momento del examen y continuó defendiendo que no se iba a anular ninguna prueba.