Las obras de ampliación y remodelación del CEIP Jaume I de Alcàsser han sacado a la luz restos óseos pertenecientes a un yacimiento visigodo. Esta intervención, dirigida por los arqueólogos Tina Herreros y Pablo Sañudo, permitirá aportar nuevos datos sobre el ya conocido yacimiento visigodo de la Senda de l'Horteta y de las poblaciones que poblaron la zona en esta época.

Los trabajos, de acuerdo con el proyecto constructivo, se han iniciado por el patio norte del recinto. De momento se han localizado siete fosas de inhumación con características similares. Todas son de forma ovalada, con una longitud superior a dos metros y anchura variable, excavadas directamente en el terreno natural. Sobre ellas se emplazan losas de piedra caliza a modo de estela o lápida que servían para señalizar su ubicación.

Con el fin de no interferir en los plazos previstos de duración de la primera fase, la excavación se centra en la documentación de las tres fosas situadas en el espacio que ocupará el nuevo pabellón de primaria, explica el consistorio valenciano.

En todas se ha localizado más de un individuo. Una de ellas contiene cuatro esqueletos adultos y uno de edad infantil: un hombre, una mujer con pendientes y otro, aún por exhumar, cuyo sexo está pendiente de determinar.

En el relleno de tierra del interior de la fosa también se han encontrado fragmentos cerámicos correspondientes a una vasija y las mandíbulas de un bóvido y un carnívoro, que formarían parte del ritual de inhumación. La cronología propuesta del conjunto gira entorno al VI d.C.

La alcaldesa de Alcàsser, Eva Zamora, quiere dejar claro que este hallazgo solo retrasará "el mínimo posible" los trabajos de ampliación y remodelación del CEIP Jaume I, además de destacar la importancia de los restos encontrados: "Aportan más información sobre los orígenes de nuestro pueblo".