Ford Almussafes volverá a la producción durante las dos últimas semanas de julio, antes de iniciar las vacaciones de verano en la planta y en medio de la aplicación del ERTE vigente hasta finales de septiembre.

Después de haber estado paralizada del 12 al 16 de julio, la factoría valenciana retoma la actividad en la planta de vehículos aunque sin el turno de noche, mientras que motores y mecanizados trabajarán a medias, ya que el lunes y el martes tienen parada por el ERTE y el miércoles se aplicará al montaje de motor.

Así, las dos próximas semanas habrá producción en la planta, que volverá a parar en agosto, del 2 al 20, por las vacaciones de agosto, y ya no tiene previsto paralizar la producción hasta el 13 de septiembre, cuando el ERTE dejará la planta sin actividad en vehículos durante una semana completa.

En el caso de motores, los días 30 y 31 de agosto parará motor y mecanizados; y en septiembre serán las jornadas del 1 y el 10.

El turno de noche, que se suspendió en el anterior ERTE, en mayo, y estaba previsto que se retomara en julio, seguirá parado durante los meses de julio, agosto y septiembre, tiempo de aplicación del ERTE (del 1 de julio al 30 de septiembre) que afecta a 6.728 trabajadores y que está motivado por la crisis de los semiconductores.

La planta valenciana de la multinacional da trabajo a unos 7.000 empleados de forma directa y a unos 24.300 de foma indirecta en las 116 empresas valencianas relacionadas con el sector de automoción, que en buena medida viven al calor de la compañía, ya que la mayoría son suministradoras.

Empresas de los sectores metalmecánico, plástico, ingenierías, servicios, logística envase y embalaje y consultoras. Actualmente, la facturación conjunta de las empresas asociadas es de más de 12.200 millones de euros, lo que supone el 18% de la cifra de negocio industrial de la Comunitat Valenciana.