Según publica hoy el diario Las Provincias, la conmisión de Patrimonio del ayuntamiento de Valencia decide hoy si la cabalgata de las llamadas magas republicanas forma parte del listado de eventos que no requerirán permiso anual al beneficiarse del Plan de Ciutat Vella.

Una decisión controvertida ya que esta fiersta solo apenas ha celebreda 6 ediciones conincidendo con la llegada de Compromís, PSOE y Podemos al gobierno municipal del Cap i Casal. En concreto hace seis años que el gobierno municipal instauró la cabalgata de las magas, y ya la quiere considerar una «actividad tradicional», tal y como tal aparece en el listado que pasa hoy por la comisión técnica de Patrimonio.

Según explica LP, la relación pretende que numerosas actividades, tanto las que necesitan instalaciones como las que no, se beneficien de lo que dicta el Plan de Ciutat Vella, en cuanto a que no deba pedirse cada año permiso a la citada comisión, que tutela todo lo que afecta a los entornos protegidos, incluso por la afección visual y paisajística.

El origen de la cabalgata de las magas republicanas fue la sustitución que se hizo en 1937 en Valencia a la de los Reyes Magos. Como demuestran las imágenes que se custodian en el archivo del Ministerio de Cultura, fue en síntesis un acto de sumisión a Stalin. Y luego nunca más se celebró hasta que en 2015 el pacto de izquierdas posibilitó que Compromís se hiciera con la alcaldía de la capital valenciana.

Desde la oposición, la portavoz del grupo popular, María José Catalá, denuncia que con esta maniobra se prtende «dar un nuevo paso para imponer su ideología y convertir por ‘decreto’ en una fiesta tradicional la cabalgata de las Magas que se hizo sólo en una ocasión en la República». Por eso el PP lamanta que el alcalde Ribó está empeñado en consolidar una fiesta que «ni es tradicional en nuestra ciudad ni está arraigada, al incluirla en el listado de las fiestas tradicionales como los Reyes Magos, los carnavales o la Semana Santa».

El listado cuenta con el visto bueno de las concejalías antes de pasar a la comisión y -salvo sorpresa mayúscula- la aprobación está garantizada. El posible escollo -explica la información de LP- es que deben pasar cinco años antes de que una actividad pueda ser catalogada como «provisional», y el año pasado, que era el quinto no se celebró por la pandemia del Covid-19.

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La cabalgata de las reinas magas que subvenciona Compromís en el Ayuntamiento de Valencia con el conocimiento de los socialistas nos ha costado 25000€. La bandera separatista es la que ha presidido este montaje catalanista @populares@popularsval@PPSenado@Abierto_PPpic.twitter.com/scRjSFMt1o

— Fernando de Rosa (@fernandoderosa4) January 12, 2020

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