La incidencia acumulada del Covid-19 en la provincia vuelve a aumentar, subiendo además de manera importante el número de poblaciones en muy alto riesgo en este indicador, es decir, que superan los 250 casos por cada 100.000 habitantes.

Son según la última actualización de Sanitat un total de 22, entre los cuales destaca la situación de Almassora con 68 casos activos, Benicàssim, con 54, L'Alcora con 29, Torreblanca con 27, Borriol con 21, les Coves de Vinromà con 16 o Altura con 10, mientras que el resto no alcanzan la decena.

Junto a todos ellos, la zona metropolitana de la capital absorbe gran parte del aumento de casos. La capital registra una nueva subida alcanzando su incidencia acumulada los 215 casos por cada 100.000 habitantes, mientras que en Vila-real este indicador sube hasta los 81 y otros municipios como Nules, Oropesa o Moncofa también registran subidas.

En el bando contrario se sitúan Burriana y Vall d'Uixó, con descenso de casos, o toda la zona costera del norte de la provincia, que no sólo disminuyen el número de positivos sino que incluso se ubican por debajo de la media nacional.

Este dato se certifica con el repaso por departamentos de salud, donde el de Vinaròs presenta las mejores cifras de la provincia, con una incidencia acumulada de 57 casos por cada 100.000 habitantes, mientras que el de la Plana se mantiene en 86 y el de Castellón sube hasta los 222, lo que lo sitúa como el segundo peor de la Comunitat tras el de Requena.