A falta de que la consellería de Sanitat notifique la incidencia de coronavirus durante la jornada del domingo, la provincia de Castellón ha reducido entre el lunes y el sábado el número de personas ingresadas en los hospitales en un 45%. Se ha pasado de los 461 que situaba desbordada la presión hospitalia hace dos semanas a los 255 que había al iniciarse el fin de semana, con una dinámica descendente diariamente.

Esta reducción de la presión hospitalaria en los centros castellonenses se traduce también en los pacientes que se encuentran en estado grave ingresadas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Hay 42 personas en estado crítico, lo que supone un descenso del 29% respecto a los 59 llegó a haber al iniciarse el mes de febrero.

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Estos datos certifican que el pico de la tercera ola ha quedado atrás y, aunque la situación no es la deseable, la presión asistencia ha disminuido considerablemente y las previsiones apuntan a que se siga reduciendo a lo largo de la semana que acabamos de iniciar.

Y es que los nuevos contagios detectados por los profesionales sanitarios son mucho menores que en semanas anteriores. Concretamente, se ha reducido en un 56% con respecto a hace dos semanas al producirse 1.733 nuevos casos de covid-19, situándose en menos de 300 (288) los casos diarios que se diagnostican, lo que da una notable reducción de la incidencia acumulada.

Los fallecimientos se reducen en un 31%

Según los datos facilitados diariamente por la consellería de Sanitat, aunque no hay constancia todavía de las personas que han perdido la vida el sábado y el domingo por coronavirus, entre el lunes y el viernes han sido 39 las víctimas de la pandemia por las 56 de los mismos días de la semana anterior, lo que sitúa en un 31% la reducción de la mortalidad durante esas jornadas.