El Equipo ROCA de la Guardia Civil de Burriana ha detenido a tres varones e investiga a otro por un delito continuado de hurto y otro de daños cometidos en una empresa de la localidad de Moncofa.

En el marco del Plan nacional contra el robo de cobre, para prevenir toda actividad ilícita relacionada con el hurto y su comercialización, los guardias civiles iniciaron una investigación tras realizar numerosas inspecciones en los centros de reciclajes de metales. Durante una de las inspecciones observaron varias ventas periódicas de cobre de pequeñas cantidades, realizadas por las mismas personas desde el pasado mes de marzo hasta finales de octubre de 2021, hecho que resultó llamativo a los agentes.

La Comunitat Valenciana "acelera" para implantar el pasaporte covid

El Villarreal se asegura la continuidad de Yeremy Pino

Estas ventas comprendidas entre los 30 hasta los 260 Kilogramos, ascendían a un total de más de 3.200 Kg de cobre. Los guardias civiles realizaron diversas comprobaciones para la localización de los vendedores, dando como resultado de las pesquisas la identidad de unos trabajadores de una empresa de construcción que se encontraban realizando reformas en la sociedad afectada.

Modus Operandi

Los presuntos autores cometían el hurto durante la jornada laboral, sirviéndose de la facilidad para acceder al interior al ser empleados de una empresa de construcción que se encontraba realizando reformas en la entidad afectada.

Estas personas una vez iniciaban los trabajos y abusando de la confianza para circular por la empresa libremente y no levantar sospechas, hurtaban el cableado de cobre de diversas líneas de producción de cerámica, compuestas por hornos y prensas. Además del hurto de cable de cobre, los presuntos autores causaron daños en unas máquinas que estaban dispuestas para ser vendidas, al sustraer el cobre que tenían y dañar el funcionamiento de las mismas. Los costes de su reparación se elevaban a más de 40.000 euros de forma que terminaron causando un perjuicio económico a la entidad con unas cuantiosas pérdidas de dinero que ascendían a 80.000 euros, al no poder destinar las mismas a la comercialización y tener que venderlas a bajo coste para chatarra.

Durante la investigación, los agentes comprobaron que los ahora detenidos realizaron 29 ventas de pequeñas cantidades de cobre para no levantar sospechas y dificultar a los guardias civiles a la hora de realizar las inspecciones y dificultar su trazabilidad.

Las pesquisas realizadas llevaron a la Guardia Civil hasta la localización y detención de cuatro varones de edades comprendidas entre los 30 y 42 años como presuntos autores de un delito continuado de hurto y otro de daños. Las diligencias han sido entregadas en los Juzgados de Nules.