Presenta su dimisión el concejal de Urbanimo por el Partido Socialista de Vinaròs, José Chaler, después de que antes de Navidad le regalara a su compañera en el Gobierno municipal y socia de Totes i Tos Som Vinaròs, Anna Fibla, restos de cordero muerto con vísceras y ojos en un amigo invisible. Durante días las dos formaciones han estado negociando cómo dar solución al conflicto existente y, finalmente, se sella con la salida de Chaler que él mismo ha anunciado.

"No iba a dimitir porque la señora Fibla pidiera mi dimisión. Dimitir o no dependía de otras variables como la pérdida de confianza que se hubiera podido producir tanto en el grupo municipal como por la ejecutiva del partido".

Chaler abandona el cargo ante la falta de apoyos de sus compañeros de formación en el ayuntamiento. "Tengo todo el apoyo de la ejecutiva y del partido, pero no tengo el apoyo del resto del grupo municipal ni del alcalde. Siendo consecuente con todo lo que dije, he presentado mi dimisión, dando un paso al lado y ya vendrán tiempos mejores".

Incluso asegura que los líderes del PSPV-PSOE en Vinaròs han tratado de frenar su adiós. "Quiero agradecer al secretario general, Eduardo Barberà y al presidente del partido, Agustí Guimerà, por el trabajo que han hecho estos días, por intentar alargar mi trabajo, pero al final no ha sido posible. Han podido más otros intereses", lamenta.

El ya ex concejal socialista hace balance de sus más de dos años en el consistorio. "Han sido dos años intensos, en los que he tenido la oportunidad de trabajar en numerosos proyectos".

Chaler no abandonará la política, con lo que anuncia que "esto no es un punto y final. Es un punto y seguido" y es que "a partir de ahora intentar mejorar la vida de la gente y desde el papel que el partido crea que puedo ser más útil, empezar a trabajar para ganar las próximas elecciones".

Chaler dimite horas antes del pleno que estaba previsto se celebrara esta tarde en el que el Partido Popular pretendía reprobarle a él y al alcalde Guillem Alsina.

Los hechos

Anna Fibla, denunciaba que recibió como regalo del amigo invisible una caja con vísceras y ojos de animales, algo que ve como ofensa hacia ella y su formación.

Lo consideraba un acto intimidatorio por parte de su compañero en el equipo de Gobierno, el concejal de Urbanismo, Deportes y Salud por el Partido Socialista, José Chaler.