La crisis del coronavirus, y en concreto el cierre total de la hostelería en la Comunidad Valenciana, ahogan a un sector que acumula meses de pérdidas y espera unas soluciones que nunca parecen llegar. Mientras tanto, la Asociación de Restaurantes de Alicante (ARA), junto con la Asociación de Locales de Restauración y Ocio de Alicante (ALROA), han presentado las primeras 487 reclamaciones patrimoniales a la Conselleria de Sanidad por las pérdidas económicas y cierres de establecimientos a causa de las restricciones aplicadas por la Generalitat.

Ambas asociaciones han hecho pública este lunes a los periodistas la cifra, ante la sede del Consell en la ciudad de Alicante, al tiempo que han reivindicado una reapertura de los negocios "inmediata" y "sin restricciones". Se han amparado en la reciente sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco que avala que los locales vuelvan a abrir al público, además de defender la "ausencia" de informes y estudios que confirmen que la actividad hostelera está relacionada con el incremento de contagios.

"Hemos presentado las primeras 487 reclamaciones patrimoniales ante las pérdidas económicos que están sufriendo los negocios que sufren desde el mes de agosto las restricciones impuestas por el Consell, y esta semana se sumarán más que o bien están en trámite o son de afectados que se han interesado ahora", ha declarado el presidente de ARA, César Anca.

Por su parte, el presidente de ALROA, Francisco Javier Galdeano, ha sostenido que las ayudas destinadas por el Consell dentro del plan 'Resiste' "no son suficientes", puesto que "dos mil euros en ayudas para un negocio cerrado desde el mes de agosto no soluciona el problema", por lo que también rechaza una reapertura del sector "de cualquier manera".

Ambos colectivos han reivindicado, además, la reapertura "inmediata" y "sin restricciones" de los negocios, y descartan apoyar una "desescalada gradual" dado que "no hay estudios que certifiquen que la hostelería es la responsable del aumento de contagios".

Aunque "se podría entender una reapertura con distancia interpersonal entre las mesas de la terraza y con un aforo limitado de seis personas por cada una", su objetivo es que se pueda consumir en barra y "volver a una cierta normalidad".

"No somos el problema, sino el mayor aliado para que no haya más contagios", han insistido, ya que creen que la solución a las fiestas en domicilios y los "constantes" botellones es la apertura de la hostelería y del ocio.

Ahora, la Generalitat tiene un plazo de seis meses para contestar a las 487 reclamaciones patrimoniales que han realizado negocios hosteleros y de ocio de la provincia de Alicante.