El Servicio de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Alicante ha acelerado el tratamiento contra la procesionaria en las pinadas de la ciudad, que ya se ha realizado en los centros educativos, plazas y zonas verdes del municipio.

Al mismo tiempo, la nueva contrata para el mantenimiento de los bosques urbanos y periurbanos ha iniciado la fumigación en los montes alicantinos para evitar la aparición de las temidas bolsas de procesionaria en los pinos.

El concejal de Medio Ambiente, Manuel Villar, ha resaltado que, "con la puesta en marcha de este nuevo servicio de mantenimiento de las zonas arboladas urbanas y periurbanas, y la incorporación de la empresa adjudicataria, se prestará la atención que requiere la conservación de los 'pulmones verdes' de la ciudad, al igual que se realiza con el resto de zonas verdes, parques y jardines".

Villar ha resaltado que "este esfuerzo añadido en la preservación de los bosques llega en un momento de pandemia en el que estos espacios medioambientales se han convertido en un lugar muy frecuentado por los alicantinos, que salen a caminar por los senderos" de los montes del municipio. Ha señalado que, tras aplicar el tratamiento de los pinos situados en colegios y zonas urbanas, ha comenzado la fumigación también en los montes con el objetivo de que en diciembre estén tratados todas las áreas bocosas de Alicante: Benacantil, Tossal, Serra Grossa, Cala Cantalar y Orgegia.

De esta manera, se espera evitar la proliferación de bolsas de procesionaria que suelen aparecen en los pinos entre enero y febrero. Con estas acciones se pretende eliminar la mayor parte de estos nidos, aunque si persistiera alguno, se procederá a su retirada de forma manual.