Se empieza a ver la luz al final del túnel. Todo apunta a que habrá público en el Rico Pérez la próxima temporada, lo que supone una gran noticia en la pelea contra la pandemia y en que el fútbol conserve su esencia. Este lunes lo adelantaba El Partidazo de Cope y hoy lo ha confirmado el Gobierno. A partir del mes de julio, una vez todas las comunidades hayan culminado la desescalada y haya desaparecido el estado de alarma, se permitirán eventos deportivos con un máximo del 30% de los aforos.

En septiembre, si no hay rebrote del virus, el tope de espectadores podría inclementarse incluso al 70%. Al Hércules, en Segunda División B y con un estadio con capacidad para casi 30.000 espectadores, le valdría con la medida que entraría en vigor el 29 de junio. Serían unos 9.000 espectadores en el estadio. Este año el Hércules ha superado los 7.000 abonados y quedaría margen incluso para unas dos mil entradas sueltas cada partido.

Si esto se confirma en las próximas semanas, el Hércules podría poner en marcha este verano la campaña de abonos con aparente normalidad. Es un alivio para la afición y también un alivio para los accionistas, Ortiz y Ramírez, que verían garantizada la principal vía de ingreso del club en esta categoría. Este año ingresaron unos 550.000 euros por este concepto.