120.000 personas atendidas el año pasado, un 20 % más que en 2021, y 26.966 ayudas monetarias -principalmente para vivienda-, lo que supone un 34 % más que un año antes, es el balance de la atención ofrecida en 2022 por Cáritas Diocesana de Madrid.

Constatan en Cáritas Madrid, además, que el perfil de demandantes de ayudas está cambiando y van en aumento los solicitantes con estudios superiores o con trabajo, señala su director, Luis Hernández Vozmediano, en el balance presentado este martes a los medios sobre la actividad de la diócesis en el último año.

En un acto en el que Laurent Vargas, una mujer llegada de Colombia ayudada por Cáritas, y el voluntario Pepe Blanco han ofrecido sus testimonios, Vozmediano ha explicado que el aumento de la atención ofrecida por Cáritas en 2022 se corresponde con un aumento de las necesidades, puesto que el año pasado estuvo marcado por la invasión de Ucrania y las guerras en otros países.

A ello se une la subida de los precios y servicios de primera necesidad por la inflación, y la llegada de personas migrantes a España huyendo de sus países porque sus vidas están en peligro o porque no tienen las condiciones necesarias para poder vivir.

El director de Cáritas Madrid ha sostenido que la labor social de la diócesis "nos permite hacer una radiografía de las necesidades sociales que se detectan en nuestra región".

"Nuestra prioridad ha sido responder a las necesidades básicas más urgentes", y dar apoyo "estructural" a las familias para "garantizar" su autonomía, el acceso a la vivienda, al empleo, a la salud y a la formación, "derechos que no siempre están al alcance de las personas que convivimos en España", ha subrayado Hernández Vozmediano, para quien la cuestión estriba en que "nadie se quede atrás".

Para atender a las familias en 2022 Cáritas Madrid ha contado con 460 Cáritas parroquiales y 319 personas; ha habido 8.763 personas voluntarias y 19.200 donantes y suscriptores.

LA VIVIENDA, EL PRINCIPAL PROBLEMA PARA LAS PERSONAS Y FAMILIAS VULNERABLES

Las guerras, la inflación y la llegada de personas migrantes han propiciado, así pues, que Cáritas Diocesana de Madrid haya atendido en 2022 a 120.000 personas, un 20 % más que en 2021, para lo que se ha destinado un total de 41.610.223 euros -frente a los 34 millones del año previo-.

De esos 41 millones de euros, 7.356.458 euros se han utilizado para entregar 26.966 ayudas monetarias, un 34 % más que en 2021.

Respecto a 2021, hay un incremento "muy sustancial" de las ayudas destinadas al pago de la vivienda, dado que suponen el 65 % de las ayudas ofrecidas en 2022.

"La estrategia de Cáritas está siendo tratar de evitar los desahucios, porque sabemos que si una persona pierde su vivienda o la habitación poder encontrar otra es una misión prácticamente imposible", ha explicado el director de Cáritas Madrid, que cree que es necesario poner los esfuerzos en la región en crear vivienda sociales.

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Otro 25 % de ayudas de 2022 estuvieron encaminadas a necesidades básicas, y un 10 % se destinaron a otros gastos.

Asimismo, las parroquias han dado ayudas por un valor de 6.435.367 euros.

UN PERFIL DE PERSONAS ATENDIDAS QUE "ESTÁ CAMBIANDO" EN UNA REGIÓN DESIGUAL

Hernández Vozmediano ha incidido en que el perfil de personas atendidas en Cáritas Madrid está "cambiando", puesto que, aunque siguen siendo mayoritariamente mujeres -58 % del total- con hijos a su cargo, ha "sorprendido" en la diócesis que en 2022 el 55 % de las personas atendidas tenían estudios superiores, y que el 43 % tenían trabajo.

"No era gente desempleada, pero no podían llegar a fin de mes y necesitaban el apoyo y la ayuda de Cáritas", ha ilustrado el director de Cáritas Madrid.

Y ha hecho hincapié en la "creciente desigualdad" de la capital. "Siendo Madrid una de las regiones más ricas de España, si no la más rica, la distancia entre los excluidos y el resto de la población va aumentando año tras año".

"Esto no son solo observaciones de Cáritas, sino que lo refrendan los datos del INE. En 2022, el 20,3 % de las personas de nuestra región se encontraban en riesgo de exclusión social", ha abundado Hernández Vozmediano, quien, en otro punto, ha calificado como "un dolor" la situación en la Cañada Real.