¿Se acuerdan del hinchable en forma de caca gigante con el que se topaban los vecinos de Torrelodones al caminar por las aceras? Pues está de gira otra vez. Se ha ido hasta Alcalá de Henares para concienciar a los propietarios de perros sobre la necesidad de que recojan los excrementos de sus mascotas.

La idea de esta campaña surgió en 2016. Entonces, en Torrelodones se recogían al día unos 500 kilos de excrementos caninos de las calles, el equivalente a una montaña de más de dos metros de altura y tres metros de ancho, que son las dimensiones de la caca. El lema fue “Poner un huevo” y el hinchable recorrió las calles más transitadas de la localidad. También había una versión más reducida, que se colocaba en medio de las aceras para entorpecer el paso de los vecinos y que vieran la incomodidad de sortear las cacas de los perros.

Encontrárselas en la calle era bastante desagradable, aunque fuesen de plástico. Pero más desagradable es transitar por las aceras sorteando los regalitos de los perros. De ahí esta campaña, a la que han querido sumarse otras localidades. 

Torrelodones también está pensando retomar la campaña durante algunas semanas: “Nosotros se la prestamos a todos aquellos municipios que nos la piden. Estamos también valorando volver a ponerla en nuestra localidad porque, fruto de esa campaña y de otras medidas, se ha reducido el número de excrementos caninos en las calles, pero todavía sigue habiendo”, explica Santiago Fernández, concejal de Medio Ambiente.

La caca gigante también la han utilizado otros municipios como Moralzarzal, Almería, Navas del Rey, Torres de la Alameda o, incluso, La Haya, como parte de sus campañas de concienciación sobre excrementos caninos en las vías públicas.