Viladecans, como Gavà y Castelldefels, cerrará su playa para la verbena de Sant Joan para evitar aglomeraciones que puedan generar un brote de Covid-19.
Siguiendo las recomendaciones del Procicat, sólo tendrán acceso a la zona los vecinos y los clientes del chiringuito de la playa y del restaurante cercano al aparcamiento de la Murtra.
En el caso de los establecimientos de hostelería, el Ayuntamiento vigilará especialmente el cumplimiento de los aforos y los horarios permitidos.
Aunque el consistorio ha decidido finalmente mantener la playa cerrada para la celebración de Sant Joan, Viladecans participó la semana pasada en la reunión de municipios metropolitanos donde, inicialmente, se anunció la "voluntad" de todos ellos de mantener sus playas abiertas para la verbena.