Mercè Conesa, presidenta del Puerto de Barcelona, ha avanzado que este miércoles se aprobará la concesión al Hermitage durante el consejo de administración, aunque queda "condicionada" a la concreción del convenio entre el Puerto y el Ayuntamiento de Barcelona y al acuerdo del patronato del Liceu.

El fondo de inversión Varia, promotor del Hermitage, ya ha dado el visto bueno a la integración del Liceu en el proyecto, con el que este último dispondría de espacios complementarios para desarrollar actividades artísticas, sociales y formativas.

Conesa ha asegurado que la colaboración está alineada con la intención del enclave de "facilitar el desarrollo de un proyecto cultural de gran interés para la ciudad, enriquecedor" y que generaría unos 380 puestos de trabajo, según el Puerto.

El Puerto quiere impulsar el futuro espacio --que supondría una inversión de 50 millones de euros-- como un centro cultural multidisciplinar y transversal, dotado de un carácter diferencial y con un fuerte componente local "arraigado" a Barcelona.

Esta colaboración hace posible un concepto de "centro de arte total", donde convivan actividades diversas y entidades de referencia en Barcelona, desde representaciones y programas expositivos y de divulgación hasta actividades relacionadas con el arte, la cultura, la investigación y la innovación.

Pretende ser "un importantísimo catalizador para acelerar la recuperación económica" de Barcelona --ha defendido Conesa-- y, una vez firmado el acuerdo de colaboración se fijará y desplegará un plan de actuación que establecerá las actuaciones a realizar.

La colaboración entre el Hermitage y el Liceu está abierta a la incorporación de otras entidades, tanto públicas como privadas, algo que demuestra la "voluntad de enriquecer" la red cultural de Barcelona y conectarla con entidades, según Conesa.