Ros ha criticado que "casi nadie habla" de cómo tienen que ser las medidas para garantizar la seguridad en el mercado laboral, después de que este no se acabara de reactivar con el fin del estado de alarma, que coincidió con el inicio del periodo de vacaciones.

La "prueba de fuego" en los centros de trabajo vendrá en septiembre, cuando mayoritariamente volverán a la actividad, por lo que Ros ha llamado a protegerlos de manera proactiva y preventiva, asegurando que se mantienen las distancias de seguridad, se va con mascarilla y se lavan las manos.

En ese sentido, ha propuesto que se hagan pruebas PCR en sectores y territorios que puedan ser complicados dadas las características de su actividad económica, por la dificultad de respetar las distancias mínimas, sus altas temperaturas o una concentración muy elevada de trabajadores.

De la misma manera que se están haciendo cribados masivos en los municipios en los que se detecta más incidencia del Covid-19, Ros ha expuesto que se pueden hacer también en polígonos industriales, con el objetivo que no se vuelva a repetir lo que pasó este verano con el sector de la fruta en Lleida.

Ros ha censurado la "incertidumbre e inseguridad" que se está dando en las actuaciones de los gobiernos, que no ayudan para nada a la economía y su reactivación.

"Estamos en una improvisación permanente", ha sostenido y ha instado a establecer, como mínimo, una planificación estratégica hasta finales de año, que pueda irse prorrogando de manera semestral o anual.

Para ello, ha indicado que se tiene que garantizar la cobertura del 100% de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) hasta diciembre, sin distinguir entre sectores, y otorgar la baja por enfermedad a los trabajadores que tengan que hacerse cargo de menores enfermos de coronavirus o que se tengan que aislar, antes de crear un permiso retribuido para ellos.

También ha apostado por apoyar al turismo, uno de principales sectores de la economía y de los más afectados por esta crisis, y evitar que el teletrabajo permanente se convierta en la única opción, teniendo en cuenta que no está completamente desarrollado y protegido y puede convertirse en una "forma de teleprecario".

El líder de UGT de Catalunya ha asegurado que no aceptarán "ningún recorte" para afrontar la crisis del Covid-19, como los que se hicieron en la de 2008.

Ros ha defendido reactivar la economía mediante la inversión pública, sobre todo, en sanidad, que está haciendo frente a la emergencia sanitaria "con la política de recortes encima".